ANTES Y AHORA

 

ANTES, ustedes no entendían y por eso seguían sus malos deseos. Pero AHORA, son hijos obedientes de Dios y no deben vivir como antes.

1 Pedro 1:14 PDT

La vida del creyente tiene un antes y un después, debemos tener en cuenta que Satanás, la carne o el mundo querrá tentarnos a regresar a la misma vida que tuvimos en nuestro pasado.

Este versículo nos recuerda que, como hijos de Dios, debemos ser obedientes y no seguir los deseos de nuestra antigua vida ignorante. Debemos dejar atrás nuestros antiguos hábitos y comportamientos y seguir el camino de la justicia y la santidad que Dios ha preparado para nosotros.

Es fácil caer en la tentación de seguir nuestros propios deseos y placeres, pero como creyentes, debemos estar dispuestos a renunciar a esas cosas y seguir a Cristo. Debemos buscar su voluntad para nuestras vidas y seguir sus mandamientos, sabiendo que Él tiene lo mejor para nosotros.

El deseo de Dios es que este versículo nos  recuerde la importancia de vivir una vida obediente y santa ante los ojos de Dios, de ser agradecidos con nuestro buen pastor, pues ha dado su vida por nosotros que somos sus ovejas.

ANTES, ustedes andaban como ovejas perdidas, pero AHORA han regresado a Cristo, que es como un pastor que los cuida y los protege.

1 Pedro 2:24‭-‬25 TLA

Olvida la vida de ANTES, y continúa en el camino que tienes AHORA de la mano de Jesús.

Dios te continúe bendiciendo.

Julia Andrea Bustamante