BENDITOS CELOS

El celo es un sentimiento que experimenta una persona cuando sospecha que la persona amada siente amor o cariño por otra, o cuando siente que otra persona prefiere a una tercera en lugar de a ella.

Como seres humanos hechos a imágen y semejanza del Señor, podemos experimentar los celos tal como lo explica la definición del diccionario y es un sentimiento natural cuando vemos que prefieren cambiar nuestro amor, amistad, cariño hacia otra persona.

No adores a ningún otro dios, porque el Señor , cuyo nombre es Celoso, es Dios celoso de su relación contigo.

Éxodo 34:14 NTV

Dios en su palabra, tal como lo vemos en el versículo enunciado, siente celos al saber que estamos entregándole el primer lugar a algo o alguien antes que a Él. 

Es probable que no reconozcamos o no nos demos cuenta de esas cosas o personas a las cuales les estamos rindiendo nuestra vida, nuestro tiempo, nuestra voluntad.

¿Le hemos estado haciendo oraciones a alguien diferente al Señor?

¿Le hemos estado dedicando más tiempo a las redes sociales que a Dios?

¿Cuando necesitamos consejo acudimos primero a un ser humano que a Dios?

¿Nuestros pensamientos constantes son para algo o alguien diferente al Señor?

¿Colocamos por encima los propios gustos que al Señor?

Si nos identificamos con alguna de las anteriores preguntas, quiero decirte que estamos cayendo en algo que es ofensivo al Señor, se llama idolatría, y quiero decirte que aunque es difícil digerir lo que te estoy escribiendo, es una verdad que el Señor durante años ha querido darle a la humanidad, lo único que desea es ser la prioridad en el corazón de cada persona que El creó, su deseo es tener una familia fiel al diseñador y dueño del universo.

¿O creen que la Escritura dice en vano que Dios ama celosamente al espíritu que hizo morar en nosotros?

Santiago 4:5 NVI

«Yo soy el Señor tu Dios. Yo te saqué de Egipto, del país donde eras esclavo.  »No tengas otros dioses además de mí.  »No te hagas ningún ídolo, ni nada que guarde semejanza con lo que hay arriba en el cielo, ni con lo que hay abajo en la tierra, ni con lo que hay en las aguas debajo de la tierra. No te inclines delante de ellos ni los adores. Yo, el Señor tu Dios, soy un Dios celoso. Cuando los padres son malvados y me odian, yo castigo a sus hijos hasta la tercera y cuarta generación. Por el contrario, cuando me aman y cumplen mis mandamientos, les muestro mi amor por mil generaciones.

Éxodo 20:2‭-‬6 NVI

Oremos: 

Padre celestial, te pedimos perdón por todas las veces que hemos puesto nuestro corazón en otras cosas o personas diferentes a ti, queremos que tú seas el primero en nuestra vida y rendir nuestra voluntad por siempre a tu majestad, te lo pedimos en el nombre de Jesucristo tu Hijo, Amén 

Dios te bendiga

Julia Andrea Bustamante