BLANDA VS ÁSPERA
La blanda respuesta quita la ira; Mas la palabra áspera hace subir el furor.
Proverbios 15:1 RVR1960
¿Te ha pasado que te encuentras con personas con tono de voz fuerte, que en vez de hablar gritan y siempre están buscando conflictos?
¿Cómo has respondido a su voz desafiante y fuerte?
En el proverbio de referencia nos dan un buen consejo: Responder a una palabra áspera con una palabra blanda.
Otra versión nos ilustra mucho más la recomendación:
La respuesta amable calma el enojo; la respuesta grosera lo enciende más.
Proverbios 15:1 TLA
Es claro que si respondemos ofensivamente a palabras fuertes de tono o mal dichas, sucederá que se va a encender un conflicto mucho peor, aprendamos del consejo que nos da el Señor en su palabra.
Por todo lo anterior es necesario que continuemos alimentando nuestro espíritu, recordemos que de lo que estamos llenos en nuestro corazón es lo que vamos a darle a las demás personas.
La biblia nos habla de un órgano que puede hacer un incendio en medio de nosotros y es la lengua, y que la persona que tenga la capacidad de ponerle freno es capaz de dominar todo su cuerpo.
Porque todos ofendemos muchas veces. Si alguno no ofende en palabra, este es varón perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo. He aquí nosotros ponemos freno en la boca de los caballos para que nos obedezcan, y dirigimos así todo su cuerpo. Mirad también las naves; aunque tan grandes, y llevadas de impetuosos vientos, son gobernadas con un muy pequeño timón por donde el que las gobierna quiere. Así también la lengua es un miembro pequeño, pero se jacta de grandes cosas. He aquí, ¡cuán grande bosque enciende un pequeño fuego! Y la lengua es un fuego, un mundo de maldad. La lengua está puesta entre nuestros miembros, y contamina todo el cuerpo, e inflama la rueda de la creación, y ella misma es inflamada por el infierno.
Santiago 3:2-6 RVR1960
Hoy te invito nuevamente a que juntos nos llenemos de buenas palabras, de buenos pensamientos, a continuar una buena relación con el Espíritu de Dios. Él nos da el dominio propio para no pecar con nuestra boca. Cada que hablemos más con el Señor, adoptaremos su mismo comportamiento y su mismo lenguaje.
Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.
2 Timoteo 1:7 RVR1960
Padre celestial, hoy oramos para no pecar con nuestra boca, ayúdanos a no responder a palabras ofensivas, danos dominio propio cada vez que nos enfrentemos a personas con lenguaje áspero. Te lo pedimos en el nombre de Jesús, Amén.
Dios te bendiga
Julia Andrea Bustamante
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