CUANDO SOY DÉBIL...
“Porque cuando soy débil, entonces soy fuerte”
2 Corintios 12:10b RVR1960
En ocasiones, podemos sentir que estamos débiles y que nuestras fuerzas flaquean. Sin embargo, es en esos momentos de debilidad que podemos experimentar el poder de Dios de una manera sobrenatural. En el anterior versículo, el apóstol Pablo habla de cómo en su debilidad, la fortaleza de Cristo se perfecciona en él. Aunque pueda parecer contradictorio, es en nuestra debilidad que Dios puede manifestar su poder de una manera extraordinaria.
La fuerza del Señor es tan sobrenatural que puede darnos la capacidad de enfrentar los desafíos o situaciones más difíciles, aunque parezca que solo seamos débiles.
Él da esfuerzo al cansado, y multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas.
Isaías 40:29 RVR1960
Cristo tiene además la facultad de hacer en nosotros lo que no creemos ser capaces por el Espíritu que nos ha dado, recordemos que ya es el Espíritu Santo que mora en nuestro ser quien lo hace todo posible cuando está en su voluntad.
"Todo lo puedo en Cristo que me fortalece."
Filipenses 4:13
Dios nos da una hermosa promesa en su palabra, es para quienes sentimos y sabemos que somos débiles, para aquellos que le amamos, para quienes reconocemos que nuestra fuerza viene del Grande y fuerte Rey de Reyes y Señor de Señores, para quienes lo esperamos con gran anhelo.
Yo sé todo lo que haces; mira, delante de ti he puesto una puerta abierta que nadie puede cerrar, y aunque tienes poca fuerza, has hecho caso de mi palabra y no me has negado. Yo haré que los de la congregación de Satanás, los mentirosos que dicen ser judíos y no lo son, vayan a arrodillarse a tus pies, para que sepan que yo te he amado. Has cumplido mi mandamiento de ser constante, y por eso yo te protegeré de la hora de prueba que va a venir sobre el mundo entero para poner a prueba a todos los que viven en la tierra.
Apocalipsis 3:8-10 DHH94I
Oremos: Señor, en medio de mi debilidad, reconozco que Tú eres mi fortaleza. Ayúdame a perseverar en la fe, confiando en que tu poder se perfecciona en mis momentos de mayor fragilidad. Que tu gracia sea suficiente para mí y que pueda glorificarte a través de mis pruebas. Amén.
¡CUANDO SOY DÉBIL...SOY FUERTE!
Dios te continúe bendiciendo
Julia Andrea Bustamante
Comentarios
Publicar un comentario