DESECHA TODO ESTO

 


En nuestra vida espiritual, hay cosas que debemos desechar para avanzar en nuestra relación con Dios. Tal como una planta necesita ser podada para crecer mejor, nosotros también debemos eliminar de nuestra vida aquello que nos aleja de Dios. Esto puede incluir hábitos, pensamientos, actitudes, o incluso relaciones que no reflejan Su voluntad. La Biblia nos llama a despojarnos de todo lo que contamina el alma y el cuerpo, para vivir una vida que agrade al Señor.


1. Desechar la vieja naturaleza

 "En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, y renovaos en el espíritu de vuestra mente, y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad."

Efesios 4:22-24

La primera cosa que debemos desechar es nuestra "vieja naturaleza". Esta representa nuestras viejas costumbres y actitudes, esas que nos separan de Dios y nos estancan en el pecado. Este versículo nos llama a despojarnos de esa vida pasada y a renovarnos en nuestra mente, tomando la justicia y la santidad como nuestras nuevas vestiduras.

2. Desechar la ansiedad 

"Echando toda vuestra ansiedad sobre Él, porque Él tiene cuidado de vosotros." 

1 Pedro 5:7


La ansiedad es algo que muchos de nosotros cargamos, pero Dios nos invita a dejarla en sus manos. No estamos diseñados para llevar el peso de nuestras preocupaciones. Al desechar la ansiedad y confiar en el cuidado amoroso de Dios, nos liberamos de un peso que nos impide experimentar la paz divina.

3. Desechar las obras de las tinieblas

 "La noche está avanzada, y se acerca el día. Desechemos, pues, las obras de las tinieblas, y vistámonos las armas de la luz."

Romanos 13:12

Aquí, Pablo nos anima a desechar todo lo que pertenece a las tinieblas, es decir, el pecado y los comportamientos que no son acordes a la voluntad de Dios. Es un llamado a tomar consciencia de que vivimos en un tiempo crucial, y debemos revestirnos de la luz, simbolizando una vida de rectitud y obediencia.

4. Desechar la falta de perdón

 "Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo."

 Efesios 4:32


El resentimiento y la falta de perdón son cargas que nos impiden avanzar. Este versículo nos recuerda que así como Dios nos ha perdonado, debemos también perdonar a otros. Desechar el rencor no solo libera al otro, sino que también nos libera a nosotros mismos para recibir la paz de Dios.

5. Desechar el amor al mundo

 "No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él."

 1 Juan 2:15


El amor al mundo se refiere a los deseos materiales, la fama, o cualquier cosa que compite por nuestro afecto por Dios. Este versículo nos advierte que debemos desechar estos afectos que nos apartan del amor del Padre. Amar a Dios implica soltar aquello que el mundo valora, pero que no tiene valor eterno.

En conclusión ,Dios nos llama a desechar todo lo que obstaculiza nuestro caminar con Él. Ya sea nuestra vieja manera de vivir, la ansiedad, el pecado, o incluso relaciones que nos afectan negativamente, debemos dejar todo eso a los pies de Cristo. Solo así podremos vivir una vida plena en Su presencia, caminando en Su luz y en Su verdad.

Oremos: Señor, hoy vengo ante ti para pedirte que me ayudes a desechar todo aquello que no te agrada. Renueva mi mente y mi corazón. Dame la fuerza para dejar atrás mi vieja naturaleza y revestirme del nuevo hombre que has creado para mí. Ayúdame a confiar plenamente en ti y a soltar toda preocupación y pecado que me aleje de ti. En el nombre de Jesús, amén.

Dios te continúe bendiciendo 

Julia Andrea Bustamante 



Comentarios

Entradas populares de este blog

BLOG PARA SEDIENTOS