¿DIME CON QUIEN ANDAS?

 

Compañero soy yo de todos los que te temen Y guardan tus mandamientos.

Salmos 119:63 RVR1960

En la anterior porción de las escrituras, encontramos a un hombre temeroso de Dios, celoso de su palabra, quien tenía muy claro el tipo de personas con las que se quería relacionar, aunque el Señor en su palabra nos dice que no debemos hacer acepción de personas (Romanos 2:11) si quiere que tengamos mucho cuidado con quienes tenemos cercanía.

Según sean nuestras compañías, puede convertirse en nuestra manera de proceder de hablar, de reaccionar ante diferentes situaciones y hacernos perder la costumbre de nuestro temor a Dios.

¡No se dejen engañar! Bien dice el dicho, que «Las malas amistades echan a perder las buenas costumbres.»

1 Corintios 15:33 TLA

Debemos ser muy cuidadosos a la hora de elegir nuestras amistades, el amor por todos debe ser general, sin embargo con aquellos que nos estemos relacionando marcarán la diferencia en nuestro caminar con el Señor, aquellos amigos que aman y temen a Dios, deberán permanecer en nuestra vida, si tenemos ese tipo de amistades debemos valorarlos y conservarlos, sin dejar de tener compasión y amor por los que no le creen, ni le honran.

El que anda con sabios será sabio, Pero el compañero de los necios sufrirá daño.

Proverbios 13:20 NBLA

Es muy fácil tomar el carácter de las personas con las que permanecemos, si es alguien iracundo, lo más probable es que adoptemos su comportamiento.

No te asocies con el hombre iracundo, Ni andes con el hombre violento, No sea que aprendas sus maneras Y tiendas lazo para ti mismo.

Proverbios 22:24‭-‬25 NBLA

Nuestra mejor compañia siempre será el Espíritu Santo, quien nos irá haciendo tomar el carácter de Cristo, en la medida que caminemos con Él, su fruto será reflejado en nuestro carácter.

En cambio, el Espíritu de Dios nos hace amar a los demás, estar siempre alegres y vivir en paz con todos. Nos hace ser pacientes y amables, y tratar bien a los demás, tener confianza en Dios, ser humildes, y saber controlar nuestros malos deseos. No hay ley que esté en contra de todo esto.

Gálatas 5:22‭-‬23 TLA

Por todo lo anterior es que podemos decir el conocido refrán ¿DIME CON QUIÉN ANDAS Y TE DIRÉ QUIEN ERES?

Dios te continúe bendiciendo

Julia Andrea Bustamante