EL LIRIO DE MI VALLE
Yo soy la rosa de Sarón, y el lirio de los valles."
Cantares 2:1
Cuando atravesamos valles
oscuros, llenos de dolor, soledad o confusión, es fácil sentir que todo está
perdido. Sin embargo, en medio de ese valle, Jesús se nos presenta como el
Lirio de los valles, una flor delicada pero resistente, pura y con olor fragante.
El lirio por lo general no crece
en las alturas, sino en los valles. Allí donde nadie quiere estar, Él florece.
Jesús no teme nuestras heridas ni nuestros días grises; al contrario, Él quiere
estar con nosotros en aquel valle para perfumarlo con su amor, su gracia y su
paz.
El lirio es blanco, símbolo de
pureza. Así es Jesús: puro, sin mancha, el único capaz de limpiar nuestro corazón
y llenar nuestra vida de esperanza.
Que hoy sea un buen día para
dejar que Jesús sea nuestro Lirio. Permitamosle entrar en nuestro valle y
transformar nuestra tristeza en alegría y aquel desierto en un jardín.
Aunque a veces sintamos que nuestro
corazón está seco y sin vida, Jesús puede hacerlo florecer con Su presencia.
"El
desierto y el lugar seco se alegrarán; el yermo se gozará y florecerá como la
rosa; florecerá profusamente y también se alegrará y cantará."
Isaías 35:1-2
Jesús nos enseña a confiar en Su
cuidado. Si Él viste con belleza a los lirios, ¡cuánto más se encargará de nosotros
"Considerad
los lirios del campo, cómo crecen; no trabajan ni hilan; pero os digo que ni
aun Salomón con toda su gloria se vistió, así como uno de ellos."
Mateo 6:28-29
"Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo." Salmo 23:4
Cuando Jesús entra en nuestro valle, su paz incomparable llena cada rincón.
"La paz os
dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro
corazón, ni tenga miedo."
Juan 14:27
Oremos:
"Señor Jesús, gracias porque
eres el Lirio de los valles. Gracias porque en mis momentos más oscuros, Tú
floreces a mi lado y llenas mi vida de Tu aroma y Tu paz. Ayúdame a confiar en
Ti y a sentir Tu presencia cada día. Amén."
Dios te continue
bendiciendo
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