¡FIRMES!
Por causa de mi nombre todo el mundo los odiará, pero el que se mantenga firme hasta el fin será salvo.
Mateo 10:22 NVI
En el momento que le permitimos a Jesús entrar en nuestro corazón y al tomar la decisión de entregarle nuestra vida, es probable que comience un camino pedregoso, en muchas ocasiones ocasionado por la oposición de nuestros familiares, amigos, entorno social, laboral, en fin, personas que nos van a dar la espalda, incluso a odiar por haber elegido seguir a Jesús, caminar con el Señor puede estar lleno de obstáculos por el rechazo pero es seguro, recordemos que tenemos la semilla de su palabra en nuestro corazón, debemos creerla, cultivarla y avanzar hacia el destino eterno.
Otros son como la semilla que se sembró en el terreno pedregoso. Cuando oyen el mensaje, inmediatamente lo reciben con alegría, pero no tienen raíz en sí y duran poco tiempo. Cuando surgen los problemas o la persecución por causa del mensaje, inmediatamente se dan por vencidos.
Marcos 4:16-17 PDT
El Señor nos anima a seguir firmes, hay promesas para quienes perseveramos, para quienes lo seguimos, le amamos con corazón sincero, así lo menciona el apóstol Pablo en el siguiente pasaje de las escrituras:
He peleado la buena batalla, he terminado la carrera y he permanecido fiel. Ahora me espera el premio, la corona de justicia que el Señor, el Juez justo, me dará el día de su regreso; y el premio no es solo para mí, sino para todos los que esperan con anhelo su venida.
2 Timoteo 4:7-8 NTV
Debemos animarnos y no mirar atrás, permanezcamos firmes en la fé y en las promesas que el Señor nos ha dado, puede que los más cercanos nos hagan a un lado, nos odien por causa del Señor pero fiel es quien nos llamó y vendrá por nosotros.
Así también ustedes, manténganse firmes y aguarden con paciencia la venida del Señor, que ya se acerca.
Santiago 5:8 NVI
Nuestra mirada puesta en el Señor, sin mirar atrás es la clave para estar ¡FIRMES!
Fijemos la mirada en Jesús, el iniciador y perfeccionador de nuestra fe, quien, por el gozo que le esperaba, soportó la cruz, menospreciando la vergüenza que ella significaba, y ahora está sentado a la derecha del trono de Dios. Así, pues, consideren a aquel que perseveró frente a tanta oposición por parte de los pecadores, para que no se cansen ni pierdan el ánimo.
Hebreos 12:2-3 NVI
Dios te continúe bendiciendo
Julia Andrea Bustamante
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