HAY MUCHO POR CONTAR

 

Vengan y escuchen, todos ustedes que temen a Dios, y les contaré lo que hizo por mí.

Salmos 66:16 NTV

En el anterior texto, el salmista inspirado y motivado por la respuesta del Señor, llama a todos aquellos que tienen temor reverente al Creador, para que oigan de sus propios labios todo lo que pasaba en su vida, cómo mientras oraba y alababa iba siendo escuchado; por eso continúa con las siguientes palabras:

 A Él clamé con mi boca, y fue exaltado con mi lengua. Si en mi corazón hubiese yo mirado a la iniquidad, El Señor no me habría escuchado. Mas ciertamente me escuchó Dios; Atendió a la voz de mi súplica. Bendito sea Dios, Que no echó de sí mi oración, ni de mí su misericordia.

Salmos 66:17‭-‬20 RVR1960

El propósito al dar estas palabras es animar al pueblo de Dios, a los que llevan una vida íntegra, a no desmayar en la oración; la respuesta está para aquellos que caminan en el Espíritu, a quienes no les cuesta vivir de la manera que a Dios le agrada, los que no contemplan la iniquidad según el pasaje bíblico; es la dicha de testificar a otros la forma de Dios responder a su clamor, a su necesidad; el salmista estaba feliz al saber que su Padre Celestial escuchaba siempre sus oraciones, eso mismo debemos hacer nosotros, animar a quienes han perdido la fuerza, a los que están esperando una respuesta de parte de Dios, a los que creen que la oración ha pasado desapercibida, de esa manera aumentará nuestra esperanza y será Glorificado nuestro Rey de Reyes y Señor de Señores.

Has aumentado, oh Jehová Dios mío, tus maravillas; Y tus pensamientos para con nosotros, No es posible contarlos ante ti. Si yo anunciare y hablare de ellos, No pueden ser enumerados.

Salmos 40:5 RVR1960

Aunque no podamos enumerar las maravillas del Señor, si podemos ir dando testimonio de lo bueno que ha sido ¿qué tal si comenzamos? 

¡Hay mucho por contar!

Dios te bendiga

Julia Andrea Bustamante