LA INSISTENCIA DE DIOS

Alégrense siempre en el Señor. INSISTO: ¡Alégrense!

Filipenses 4:4 NVI

Aquel que escribió las anteriores palabras y con la inspiración del Espíritu Santo fue Pablo, apóstol del Señor Jesucristo cuya vida fue pasada por grandes tribulaciones y dificultades; se puede decir que fue uno de los mártires más impresionantes que ha tenido la iglesia; a pesar de su sufrimiento y pruebas permanecía alegre, pues él sabía que su felicidad dependía de Dios.

Estén siempre alegres,

1 Tesalonicenses 5:16 NVI

El apóstol Pablo tenía claro que lo que sufría en la tierra era pasajero y que aquel dolor que estaba pasando iba a ser compensado con la Gloria preparada para los que creen en Él.

Pues nuestras dificultades actuales son pequeñas y no durarán mucho tiempo. Sin embargo, ¡nos producen una gloria que durará para siempre y que es de mucho más peso que las dificultades!

2 Corintios 4:17 NTV

Por el pecado que entró en la humanidad deberíamos vivir en desdicha, tristes y derrotados, sin embargo como hijos de Dios debemos permanecer felices cualquiera que sea nuestra situación, el gozo que Dios nos da es para la eternidad  y podemos comenzar a experimentarlo desde aquí en la tierra; 

Nuestra mirada debe estar puesta en Jesús. Tú y yo somos el fruto de su aflicción y Él ha quedado satisfecho al entregar su vida en la Cruz para darnos alegría, por eso es la insistencia de Dios, al igual que el Salmista debemos decirnos a nosotros mismos:

¿Por qué tengo que estar tan angustiado y sufrir tanto? Confía en Dios. Volveré alabarlo por haberme salvado.

Salmos 42:11 PDT

Si no has vuelto a sonreír, recuerda que en la Cruz Jesús pensó en ti, sufrió por ti, murió por ti, para darte su gozo, la salvación y una alegría eterna.

Hazme sentir de nuevo la alegría de tu salvación; y que me sostenga tu Espíritu que me guía.

Salmos 51:12 PDT

Dios te continúe bendiciendo

Julia Andrea Bustamante