LOS BENDITOS DEL PADRE

Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo. Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui forastero, y me recogisteis; estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí.

S. Mateo 25:34‭-‬36 RVR1960

La palabra herencia se define como  un acto jurídico que consiste en la transmisión de los bienes, deberes y derechos de una persona a otra.

En este caso específico nuestro Padre Celestial tiene una herencia preparada para todos sus hijos, aquellos que tienen un corazón semejante al de su amado Hijo Jesucristo.

En el versículo anterior encontramos algo muy especial; el Señor se complace cuando le brindamos ayuda al necesitado, Dios toma este gesto como si se lo estuviéramos haciendo a Él mismo.

Servir al pobre es hacerle un préstamo al Señor ; Dios pagará esas buenas acciones.

Proverbios 19:17 NVI

Nuestro Señor Jesús nos llama los benditos de su Padre y nos garantiza la herencia más maravillosa que podamos recibir, un Reino preparado desde antes de la creación del mundo, el cual vale mucho más que el oro o la plata, esta herencia ninguno de nosotros la podemos imaginar.

A eso se refieren las Escrituras cuando dicen: Ningún ojo ha visto, ningún oído ha escuchado, ninguna mente ha imaginado lo que Dios tiene preparado para quienes lo aman.

1 Corintios 2:9 NTV

Él dueño del Universo es nuestra gran bendición, su presencia por toda la eternidad es nuestro gran tesoro.

Señor , solo tú eres mi herencia, mi copa de bendición; 

Salmos 16:5a NTV

Somos benditos de nuestro Padre Celestial.

Dios te bendiga

Julia Andrea Bustamante