¡NI ÁÑADAS, NI QUITES!
No añadiréis a la palabra que yo os mando, ni disminuiréis de ella, para que guardéis los mandamientos de Jehová vuestro Dios que yo os ordeno.
Deuteronomio 4:2 RVR1960
Este versículo nos enseña la importancia de respetar y preservar la Palabra de Dios en su forma original. Dios es el autor de la Biblia, y Su Palabra es perfecta y completa. No debemos alterarla ni añadirle nuestras propias ideas o interpretaciones, esto podría traer consecuencias nada agradables.
Yo testifico a todo aquel que oye las palabras de la profecía de este libro: Si alguno añadiere a estas cosas, Dios traerá sobre él las plagas que están escritas en este libro. Y si alguno quitare de las palabras del libro de esta profecía, Dios quitará su parte del libro de la vida, y de la santa ciudad y de las cosas que están escritas en este libro.
Apocalipsis 22:18-19 RVR1960
Además, este pasaje nos muestra que Dios se preocupa por la verdad y la precisión en la comunicación de Su mensaje. Él quiere que Su pueblo transmita Su Palabra de manera fiel y exacta, sin distorsionarla ni tergiversarla.
Esto también nos desafía a ser cuidadosos en nuestra lectura y estudio de la Biblia. Debemos esforzarnos por comprender el contexto, la cultura y la intención original de los escritores bíblicos para evitar interpretaciones erróneas.
En resumen, el texto nos recuerda la importancia de respetar y preservar la Palabra de Dios en su forma original, transmitirla con precisión y estudiarla con diligencia. Sigamos este mandato para crecer en nuestro conocimiento y comprensión de la verdad de Dios.
¡NI AÑADAS, NI QUITES!
Dios te continúe bendiciendo
Julia Andrea Bustamante
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