¡NO DEJES DE SOÑAR!
¡Aquí viene el soñador! —dijeron—. Vamos, matémoslo y tirémoslo en una de esas cisternas. Podemos decirle a nuestro padre: “Un animal salvaje se lo comió”. ¡Entonces veremos en qué quedan sus sueños!
Génesis 37:19-20 NTV
¡Soñar no cuesta nada! Es un dicho popular, sin embargo a veces cuesta bastante. El texto de las escrituras del inicio, nos muestra a José, un joven soñador, un hombre al que Dios le había mostrado su propósito de vida; sin embargo sus sueños no eran del agrado de su familia. Como es natural compartir con las personas que amamos nuestras visiones, este joven quiso contarles aquello que Dios le iba mostrando; era tal el disgusto de sus hermanos al escucharle con emoción relatar lo que pasaría con su vida que deciden matarlo; De la misma manera el diablo ha querido desde el principio de los tiempos, dañar todo propósito de Dios, así lo dice el Señor en su palabra:
El propósito del ladrón es robar y matar y destruir; mi propósito es darles una vida plena y abundante.
Juan 10:10 NTV
¿Sabías que a menudo personas cercanas a nosotros quieren que nuestros sueños sean abortados? o les cuesta creer que Dios usa personas ordinarias para realizar cosas extraordinarias? Dios te dice hoy ¡No puedes renunciar a tus sueños! ellos se cumplirán como se te han trazado.
SEÑOR, tú cumplirás lo que has prometido hacer para mí. SEÑOR, tu fiel amor es para siempre; por eso sé que no abandonarás a quienes tú mismo creaste.
Salmos 138:8 PDT
Si Dios te ha dado sueños, cree, espera en ellos, a su tiempo Dios hará que se hagan realidad; aunque en el camino encuentres tropiezos que te quieran hacer renunciar, lo dicho por el Señor se cumplirá.
Pero Dios le dijo a Moisés: —¿Tú crees que no puedo hacerlo? Pues ahora verás si cumplo o no con mi palabra.
Números 11:23 TLA
Dios te bendiga
Julia Andrea Bustamante
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