¡PERMANECE!
Y ahora, hijitos, permaneced en él, para que cuando se manifieste, tengamos confianza, para que en su venida no nos alejemos de él avergonzados.
1 Juan 2:28 RVR1960
Según el diccionario, la palabra permanecer es mantenerse sin cambios en un determinado estado, condición o situación.
De acuerdo con la anterior definición y el versículo enunciado, el apóstol Juan nos aconseja mantenernos en Jesús; esto lo podemos conseguir estando en comunión con Él diariamente, aprendiendo de su palabra y obedeciendo sus mandamientos, para eso fuimos creados.
Fiel es Dios, por medio de quien fueron llamados a la comunión con Su Hijo Jesucristo, nuestro Señor.
1 Corintios 1:9 NBLA
Permanecer en el Señor nos ayuda para que no sintamos vergüenza delante de Él cuando regrese por su iglesia, así lo expresa el texto inicial, la deshonra que podemos sentir es haberle dado la espalda, no haber tenido fruto de arrepentimiento, ni ningún otro fruto que Dios esperaba; lo más triste y que nos llenaría de más vergüenza es haber caminado en algún momento a su lado y no poder estar eternamente con Él.
Sigan unidos a mí, como yo sigo unido a ustedes. Una rama no puede dar uvas de sí misma, si no está unida a la vid; de igual manera, ustedes no pueden dar fruto, si no permanecen unidos a mí. »Yo soy la vid, y ustedes son las ramas. El que permanece unido a mí, y yo unido a él, da mucho fruto; pues sin mí no pueden ustedes hacer nada. El que no permanece unido a mí, será echado fuera y se secará como las ramas que se recogen y se queman en el fuego. »Si ustedes permanecen unidos a mí, y si permanecen fieles a mis enseñanzas, pidan lo que quieran y se les dará. En esto se muestra la gloria de mi Padre, en que den mucho fruto y lleguen así a ser verdaderos discípulos míos. Yo los amo a ustedes como el Padre me ama a mí; permanezcan, pues, en el amor que les tengo. Si obedecen mis mandamientos, permanecerán en mi amor, así como yo obedezco los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor.
San Juan 15:4-10 DHHDK
Oremos cada día para poder permanecer en Él; tenemos todo a nuestro alcance para hacerlo, su Espíritu Santo nos da las ganas y la voluntad, solo es querer y determinarse seguir a los pies del amado cordero de Dios.
Dios te bendiga
Julia Andrea Bustamante
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