¡PILAS CON EL LADRÓN!


El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.

S. Juan 10:10 RVR1960


Es importante que tengamos en cuenta que hoy más que nunca, Satanás está dispuesto a acabar con esta generación y en especial con los hijos de Dios; en las escrituras es llamado el ladrón porque su propósito es robar ilusiones, matar la fé, destruir la esperanza que nos fue dada a través de Jesucristo; este es el tiempo en que nos debemos levantar a batallar, continuar creyendo que tenemos un Dios que nos ama, Él es Soberano, tiene la potestad y el control de cada situación en nuestra vida, Cualquiera que sea la circunstancia nada nos podrá separar del amor del Señor (Romanos 8:35); Dios dijo que en el mundo tendríamos que enfrentar

Pruebas (Juan 16:33) y que nada sería fácil, pero nos aseguró que Siempre estaría con nosotros (Mateo 2820b) y esa es la confianza que debe vencer al enemigo y al mundo, nuestra Fé.


Pues todo hijo de Dios vence a este mundo de maldad, y logramos esa victoria por medio de nuestra fe. ¿Y quién puede ganar esta batalla contra el mundo? Únicamente los que creen que Jesús es el Hijo de Dios.

1 Juan 5:4‭-‬5 NTV


Así que si crees que Jesucristo es el Hijo de Dios, que venció la muerte, y cargó con nuestras aflicciones, no puedes permitir que las pruebas te roben las ilusiones, la esperanza y la fe, esa fe es la que nos debe mantener de pie para recibir lo que nos tiene preparado a los que le amamos (1 Corintios 2:9) más allá de lo que vemos en este mundo, es decir la eternidad.


Mientras vivimos dentro de esta carpa, sufrimos y gemimos porque no quisiéramos que nos la quitaran. Más bien quisiéramos ser revestidos con un cuerpo celestial para que nuestro cuerpo mortal quede totalmente cubierto de vida. Dios es quien nos ha preparado para esto y nos ha dado su Espíritu como adelanto que garantiza que cumplirá sus promesas.  Por eso siempre estamos confiados. Sabemos que mientras vivamos en esta carpa estaremos lejos de nuestro hogar con el Señor. Pues vivimos por la fe y no por lo que vemos.

2 Corintios 5:4‭-‬7 PDT


¡No permitas que el ladrón te robe más! levántate, nos esperan las promesas hechas por el Eterno.


Dios te bendiga


Julia Andrea Bustamante


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