PROBADA Y REFINADA

 

La confianza que ustedes tienen en Dios es como el oro: así como la calidad del oro se pone a prueba con el fuego, la confianza que ustedes tienen en Dios se pone a prueba con los problemas. Si ustedes pasan la prueba, su confianza será más valiosa que el oro, pues el oro se puede destruir. Así, cuando Jesucristo aparezca, hablará bien de la confianza que ustedes tienen en Dios, porque una confianza que ha pasado por tantas pruebas merece ser alabada.

1 Pedro 1:7 TLA

En este versículo, el apóstol Pedro nos habla sobre la prueba de la confianza en el Señor. Él compara nuestra fe con el oro que es refinado en el fuego. Así como el oro es purificado y se vuelve más valioso a medida que pasa por el fuego, nuestra fe también es probada y fortalecida a través de las pruebas y dificultades que enfrentamos en la vida.

Es importante recordar que Dios permite que pasemos por pruebas para que nuestra fe sea fortalecida y purificada. Aunque las pruebas pueden ser difíciles y dolorosas, debemos confiar en que Dios tiene un propósito mayor en ellas. Nuestra fe en Dios y en su poder para ayudarnos nos llevará a través de cualquier adversidad.

Cuando perseveramos en la fe durante las pruebas, nuestra respuesta es una alabanza a Dios. Nuestra fe en medio de las dificultades es un testimonio vivo de la obra de Dios en nuestras vidas. Además, cuando confiamos en Dios y permanecemos fieles a pesar de las pruebas, recibimos la promesa de que seremos honrados y glorificados cuando Jesucristo sea revelado.

Hermanos míos, ustedes deben tenerse por muy dichosos cuando se vean sometidos a pruebas de toda clase. Pues ya saben que cuando su fe es puesta a prueba, ustedes aprenden a soportar con fortaleza el sufrimiento. Pero procuren que esa fortaleza los lleve a la perfección, a la madurez plena, sin que les falte nada.

Santiago 1:2‭-‬4 DHH94I

Entonces, cuando enfrentes pruebas y dificultades, recuerda que tu fe está siendo PROBADA Y REFINADA. Confía en Dios, persevera en la fe y alaba a Dios en medio de las pruebas. Recuerda que al final, serás honrado y glorificado por tu fidelidad.

Dios te continúe bendiciendo

Julia Andrea Bustamante