QUE NO TE ESPANTE
Porque el temor QUE ME ESPANTABA me ha venido, Y me ha acontecido lo que yo temía.
Job 3:25 RVR1960
En este versículo, Job expresa su angustia y temor ante las circunstancias difíciles que está enfrentando. Job ha perdido a sus hijos, sus posesiones y su salud, y se encuentra sumido en un profundo sufrimiento. En medio de su dolor, Job reconoce que sus peores temores se han hecho realidad.
Este versículo nos muestra la vulnerabilidad y la humanidad de Job. A veces, en momentos de dificultad, nuestros miedos más profundos pueden manifestarse y abrumarnos. Sin embargo, es importante recordar que incluso en medio de nuestros temores y angustias, Dios está presente y dispuesto a ayudarnos.
A lo largo del libro de Job, vemos cómo Job lucha con sus preguntas y dudas, pero también cómo Dios se revela a sí mismo de una manera poderosa. Aunque Job no entiende completamente el propósito de su sufrimiento, aprende a confiar en la soberanía y la bondad de Dios.
En nuestra propia vida, es posible que enfrentemos momentos de temor y angustia. Pero podemos encontrar consuelo en saber que Dios está con nosotros en medio de nuestras luchas. Él nos promete su presencia constante y su ayuda en tiempos de necesidad.
He aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.
S. Mateo 28:20b RVR1960
Recordemos que aunque enfrentemos temores y dificultades, podemos confiar en la presencia y el cuidado de Dios.
- Dios está dispuesto a ayudarnos y fortalecernos en medio de nuestras luchas.
- Aunque no siempre entendamos el propósito de nuestro sufrimiento, podemos confiar en la soberanía y la bondad de Dios.
Que Job 3:25 nos recuerde que, incluso en medio de nuestros temores y angustias, podemos encontrar consuelo y esperanza en la presencia de Dios. Él es nuestro refugio y fortaleza en tiempos de dificultad.
Echa tu temor, ¡QUE NO TE ESPANTE!
Dios te continúe bendiciendo
Julia Andrea Bustamante
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