RECONOCER

 


Si afirmamos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos y la verdad no está en nosotros. Si confesamos nuestros pecados, Dios, que es fiel y justo, nos los perdonará y nos limpiará de toda maldad. Si afirmamos que no hemos pecado, lo hacemos pasar por mentiroso y su palabra no está en nosotros.

1 Juan 1:8‭-‬10 NVI


Una de las cosas más difíciles para el ser humano es RECONOCER su errores, según el texto anterior ninguno de nosotros puede decir que no se equivoca, por nuestra naturaleza caída es que tenemos la tendencia a negar que fallamos.

La sangre de Jesús hace que todos esos errores sean borrados, siempre y cuando haya arrepentimiento y lo aceptemos , no solo se necesita reconocer sino sentir dolor en nuestro corazón al ofender a Dios, solo así experimentaremos la salvación.


La tristeza que proviene de Dios produce el arrepentimiento que lleva a la salvación, de la cual no hay que arrepentirse, mientras que la tristeza del mundo produce la muerte.

2 Corintios 7:10 NVI


El enemigo de Dios jamás RECONOCIÓ su error, por esa razón el Señor lo expulsó de su Reino, oremos que no nos pase a nosotros tal situación y perdamos el amor que nos ofrece  nuestro Padre.


Los que piensan hacer lo malo cometen un grave error; los que procuran hacer lo bueno reciben el gran amor de Dios.

Proverbios 14:22 TLA


Reflexionemos ¿Cuántos son los errores que estamos cometiendo hoy que necesitan ser confesados? Si aún no sabemos cuáles son, tenemos al Espíritu Santo para que nos muestre.


Nadie parece darse cuenta de los errores que comete. ¡Perdóname, Dios mío, los pecados que cometo sin darme cuenta!

Salmos 19:12 TLA


Hay bendición en RECONOCER nuestros errores, de esa manera demostramos que el amor a Dios está en nosotros, la verdad trae su recompensa.


Que el amor y la VERDAD no se separen de ti: átalos a tu cuello, grábalos en tu corazón; así obtendrás estima y favor ante Dios y ante los hombres.

PROVERBIOS 3:3‭-‬4 BHTI


Esa es la bendición de saber RECONOCER nuestro error delante de Dios y las personas.


Comparte con quién Dios te guíe


Dios te continúe bendiciendo 


Julia Andrea Bustamante 









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