RESPONDIENDO A LA ENVIDIA

 

La envidia es un sentimiento de deseo o resentimiento hacia las cualidades, logros o posesiones de otra persona. En la Biblia, la envidia se menciona como un pecado que puede llevar a sentimientos negativos y los peores conflictos.  

"La envidia pudre los huesos, pero la amabilidad renueva la salud". 

Proverbios 14:30

La envidia puede ser destructiva y es importante abordarla a través de la oración, la reflexión y el amor hacia los demás.

 "No nos hagamos vanagloriosos, irritándonos unos a otros, envidiándonos unos a otros". 

Gálatas 5:26

La envidia surge en el corazón de Satanás, mucho antes de que el Señor formara al hombre del polvo de la tierra; es la raíz del mal en la humanidad; a causa de ella el mundo está como lo vemos hoy; el enemigo con su engaño ha querido dejar esa marca en cada ser humano y lo hizo desde el Edén. 

Como seres humanos es probable  experimentarla siendo influenciados por el enemigo o por el contrario también podemos despertar la envidia en muchas personas ; veamos por la palabra algunas maneras de responder a aquellos a quienes tienen ese sentimiento hacia nosotros o como debemos responder si somos nosotros quienes cargamos con ese sentimiento.

1. Confia en la justicia de Dios

"Porque los ojos del Señor están sobre los justos, y sus oídos atentos a sus oraciones; pero el rostro del Señor está contra aquellos que hacen el mal". 

1ra Pedro 3:12

Dios es quien conoce el corazón de cada persona, es Él quien sabe nuestra manera de obrar, El Señor pesa cada intención del corazón, ante Él estamos completamente desnudos.

2. Mantén un corazón limpio y responde con paz.

"No paguen a nadie mal por mal. Procuren hacer lo bueno delante de todos. Si es posible, y en cuanto dependa de ustedes, vivan en paz con todos."

Romanos 12:17

Cómo ya Sabemos que Dios pesa los corazones, también debemos saber que el Señor conoce si en nuestro interior hay deseos negativos; por esa razón no debemos pagar de mala manera a quien procede con envidia en nuestra vida.

3. No te dejes consumir por la envidia ajena; Concéntrate en tu propósito

"Deja de preocuparte por los perversos y no envidies a los malhechores. Porque como la hierba, pronto se secarán; como las flores, se marchitarán".

Salmos 37:1-2 

Es cierto además que todo lo malo que sembramos eso vamos a cosechar, si queremos proceder de la misma manera que una persona con sentimientos de envidia terminaremos con una vida seca y marchita.

4. Ora por aquellos que te tienen envidia.

"Pero yo les digo: Amén a sus enemigos y oren por quienes los persiguen"

Mateo 5:44

Se puede decir que aquellas personas que tienen ese tipo de sentimientos hacia nosotros, vienen siendo un tipo de enemigos nuestros, el hecho de tener un anhelo egoísta y destructivo que busca menospreciar nuestras cualidades, logros o posesiones es una evidencia en este tipo de personas, por eso es necesario orar.

El amor genuino es el antídoto para todo esto, A Jesús también lo envidiaron, sin embargo Él respondió con amor ¿Por qué no podemos responder de la misma manera? 

Si ya sabes quién te está en envidiando ora, si sientes envidia por alguien también ora.

Oremos:

Padre, ayúdame a responder a la envidia con amor y sabiduría. Dame un corazón limpio que no se deje consumir por la malicia de otros, sino que siga fiel en Tu propósito. Ayúdame a confiar en que tú eres mi defensor y mi refugio. Manténme además siendo libre de experimentar envidia por los demás, En el nombre de Jesús, amén.

Dios te continúe bendiciendo 

Julia Andrea Bustamante