¡SI CONOCIERAS EL DON DE DIOS!

 


“Respondió Jesús y le dijo: Si conocieras el don de Dios, y quién es el que te dice: ‘Dame de beber’, tú le pedirías, y él te daría agua viva.” 

(Juan 4:10)

En el encuentro de Jesús con la mujer Samaritana, se revela uno de los aspectos más profundos del carácter de Dios: Él es el proveedor de un DON que satisface completamente. La mujer buscaba agua física, pero Jesús le ofreció algo mucho más grande: el agua viva que solo Él puede dar.

Este DON es la Salvación y la Vida Eterna. Es un regalo que no podemos ganar con nuestras fuerzas ni méritos; viene directamente del amor y la gracia de Dios.  

 “Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.”

(Romanos 6:23)

Jesús usa la figura del agua para ilustrar cómo el Espíritu Santo llena nuestras vidas con su presencia, quitando la sed espiritual que ninguna cosa en el mundo puede saciar

“¡A todos los sedientos: Venid a las aguas; y los que no tienen dinero, venid, comprad y comed! Venid, comprad sin dinero y sin precio, vino y leche
(Isaías 55:1)

Cuando Jesús dice además  “si supieras QUIÉN es el que te dice dame de beber”, aclara que no solo ofrece el don, Él es el don. 

  “Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.”

(Juan 14:6)

Reconocer quién es Jesús y aceptarlo como el Salvador es lo que nos permite acceder a este regalo eterno.

“Mas el que bebiere del agua que yo le daré, no tendrá sed jamás; sino que el agua que yo le daré será en él una fuente de agua que salte para vida eterna.”

 (Juan 4:14)

El anterior verso significa que los que aceptan el DON de Dios no solo son saciados, sino que también se convierten en canales de bendición para otros. Esta agua viva fluye y transforma nuestras vidas, llevándonos a compartir el amor de Cristo con el mundo, es por esto que estos devocionales Rios de agua Viva tienen como objetivo extender el Don de Dios (Jesucristo) y su mensaje a muchos lugares.

¿Què tal si reflexionamos un poquito?

  1. ¿Hay áreas de tu vida donde has buscado saciar tu sed con cosas tempo¿
  2. Has orado para recibir o redescubrir el DON de Dios, pidiéndole que llene cada rincón de tu corazón?
  3. ¿Què tal si nos convertimos en testigos de este Don? compartamos con otros lo que Jesús ha hecho en nosotros.

Oremos: 

Señor, gracias por el DON de la Salvación y el Agua Viva que solo Tú puedes dar. Ayúdanos a buscarte siempre como nuestra fuente de vida y a compartir tu amor con aquellos que aún tienen sed. En el nombre de Jesús, amén.


Comparte con quien el Señor te guíe

Dios te continúe bendiciendo

Julia Andrea Bustamante


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