SU VOZ ME ALIENTA

 

Cuando me hablabas, yo devoraba tus palabras; ellas eran la dicha y la alegría de mi corazón, porque yo te pertenezco, Señor y Dios todopoderoso.

Jeremías 15:16 DHH94I

Las que somos madres de familia, sabemos que el llanto de nuestros hijos al nacer es consolado solamente con escuchar nuestra voz, se sienten seguros;  De la misma forma nuestra vida se llena de paz, gozo cuando nuestro Padre celestial nos habla a través de su palabra; ese mensaje llega a nuestro ser porque reconocemos que es la voz de nuestro Papá.

Los consolaré allí, en Jerusalén, como una madre consuela a su hijo. Cuando vean estas cosas, su corazón se alegrará. Florecerán como la hierba.

Isaías 66:13‭-‬14a NTV

En el momento que menos lo esperamos, cuando pensamos que estamos sin salida, desesperados, ahí llega su voz, aquella que nos anima, que nos reconforta, es tan aguda su voz sobre nosotros que la alegría que experimentamos es mayor que la tristeza que nos embargaba. Nuestro Padre siempre tiene palabras que nos animan, lo único que pide es estar atento a lo que nos quiere decir, buscando su presencia.

Yo amo y deseo tu palabra, pues me llena de alegría.

Salmos 119:47‭-‬48 TLA

¿Estás triste, sin consuelo, desanimado?

Tu padre te dice hoy: 

¿Se olvidará la mujer de lo que dio a luz, para dejar de compadecerse del hijo de su vientre? Aunque olvide ella, yo nunca me olvidaré de ti.

Isaías 49:15 RVR1960

Esa es su voz amorosa, Él nos ama y alienta.

¡Nunca se olvidará de nosotros!

Dios te bendiga

Julia Andrea Bustamante