LOS PIES SOBRE PEÑA

Me hizo sacar del pozo de la destrucción, del lodo cenagoso; puso mis pies sobre peña y enderezó mis pasos.

Salmos 40:2 (RVR60)

El Salmo 40 es un canto de gratitud y confianza en Dios. David describe cómo el Señor lo rescató de una situación desesperada, simbolizada por un "pozo de destrucción" y "lodo cenagoso". Estas imágenes representan momentos de angustia, pecado o desesperanza en los que nos sentimos atrapados. Pero Dios no solo nos saca de allí, sino que nos coloca en un lugar firme ("sobre peña") y guía nuestro camino.  

Me sacó de las muchas aguas... me libró porque me amó.

Salmos 18:16-19 (RVR60)

Dios actúa por amor. Su rescate no es casualidad, sino resultado de Su cuidado por nosotros.  

Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo... no te anegarán.

Isaías 43:2 (RVR60)

Aun en las pruebas, Dios promete Su presencia y protección.  

Desde lo alto extendió su mano, me tomó y me sacó de las muchas aguas.

2 Samuel 22:17 (RVR60)   

Reitera que el auxilio viene de lo alto; es Dios quien interviene con poder.  

Me esconderá en su tabernáculo... me pondrá en alto sobre una roca.

Salmos 27:5 (RVR60)

La "roca" simboliza seguridad y elevación espiritual, como en Salmo 40:2.  

No te alegres de mí, enemiga mía... aunque caiga, me levantaré.

Miqueas 7:8 (RVR60)

Aunque el lodo humilla, Dios nos levanta con propósito.  

Reconoce tu dependencia de Dios: Como David, clama a Él en su desesperación (Salmo 130:1).  

Confía en Su tiempo: Dios actúa "sacándote" cuando es el momento perfecto (Habacuc 2:3).  

Vive en firmeza: La "peña" es Cristo (1 Corintios 10:4). Edifica tu vida sobre Él.  

Oremos:

Señor, gracias porque me sacas del lodo de mis errores y me das un nuevo comienzo. Pon mis pies sobre la roca de Tu verdad y guía mis pasos. Ayúdame a confiar en Ti, incluso cuando la esperanza parece lejana. En el nombre de Jesús, amén.

Dios te continúe bendiciendo 

Julia Andrea Bustamante